Soler: ´Tenía claro dónde quería arrancar si tenía fuerzas y he podido llegar solo´

En una clara demostración, una más en los últimos años, de su calidad mundial, Marc Soler (Movistar Team) remató en solitario una fuga de largo recorrido, una seña de identidad de toda su carrera como ciclista, para ofrecer este sábado a los telefónicos el primer triunfo de su 2020 en el Trofeo Pollença - Port d'Andratx, tercera manga de la Challenge de Mallorca (168 km).

Tres años y medio después de su estreno en la Route du Sud 2016, el catalán volvió a alzar los brazos tras propiciar, en la zona del Coll d'en Bleda (2ª), a más de 70 km de la llegada, una fuga de casi veinte corredores iniciada con su ataque junto a Lennard Kämna (BOH). El grupo, que como un acordeón alcanzó más de 3' de margen, cayó después hasta 50" por el empuje de Kometa y Burgos y acabó claudicando de cara a meta, se rompió con una nueva serie de ataques de los Bora junto a Soler, que se marchó en la fase decisiva junto a Gregor Mühlberger (BOH). Mientras, su compañero Davide Villella, también atento a los movimientos, dificultaba la persecución de seis hombres por detrás.

En la zona de Mon Port, la ascensión final de unos dos kilómetros con rampas de hasta el 20%, Soler dejó atrás con una arrancada seca a Mühlberger y pudo celebrar con margen, mientras Villella firmaba un meritorio podio (3º) y Valverde daba tiempo al grupo principal en 10ª posición. Un remate excelente para una Challenge 2020 de mérito hasta el momento para Movistar Team, competición que cerrarán mañana con el inevitable sprint del Paseo Marítimo de Palma (159 km).

DECLARACIONES / Marc Soler:

"Muy contento por esta primera victoria del año, tanto para mí como para el equipo. Ha sido un día muy duro, con mucha locura y también mucho sufrimiento, pero con final feliz. En la bajada del Puigmajor, donde Buchmann ayer nos dejó atrás, el pelotón se ha cortado, y al empezar Bleda ha habido varios ataques que han acabado formando ese grupito de veinte que nos hemos jugado el triunfo.

Era un terreno muy duro, con mucho repecho y esa fuga se ha ido cortando poco a poco. En un determinado momento hemos podido abrir hueco Mühlberger y yo de los que iban con nosotros y enseguida hemos encontrado muy buen entendimiento. El otro día vinimos a entrenar por la zona de Andratx y más o menos conocía la última subida, por lo que tenía claro dónde quería arrancar si tenía fuerzas y he podido llegar solo.

Contentos de que la semana en Mallorca haya salido bien, con el podio de Alejandro ayer y el triunfo y el 3º de Davide hoy aquí. Ahora vamos a Valencia, donde tendremos un final parecido a este, pero más largo, en Bernia el sábado que viene. Veremos cómo se nos da allí".

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