La AMA y la UCI apelan ante el TAS el caso de Kreuziger

La Unión Ciclista Internacional (UCI), junto con la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), ha decidido apelar ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) la decisión del Comité Olímpico Checo de absolver a Roman Kreuziger (Tinkoff-Saxo) por las anomalías que se encontraron en el Pasaporte Biológico del corredor en 2011 y 2012.

Después de revisar el expediente completo y de haber examinado cuidadosamente la decisión, la UCI y la AMA presentarán un recurso ante el TAS con la petición de que se considere la posibilidad de una sanción a Kreuziger en base a las reglas del Código Mundial Antidopaje.

El Comité Olímpico Checo concluyó en septiembre que Kreuziger no violó las normas antidopaje en los valores de su pasaporte biológico y que podía competir. Así que regresó en la Milán-Turín el 1 de octubre y corrió Lombardía, Paris-Bourges y Paris-Tours, después de estar provisionalmente suspendido desde el Tour de Suiza en junio.

El Tinkoff Saxo anunció el pasado 28 de junio, poco antes del inicio del Tour de Francia, que había recibido una notificación de la UCI donde se le indicaba que se abría un procedimiento disciplinario a Kreuziger por anormalidades detectadas en su pasaporte biológico en 2011 y 2012, cuando era corredor del Astana. En concreto, el Consejo de Expertos de la UCI concluyó que los valores sanguíneos de Kreuziger mostraban irregularidades del mes de marzo al mes de agosto de 2011 y también del mes de abril del 2012 hasta la conclusión del Giro de Italia de ese año.

El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ya desestimó en agosto el recurso de Kreuziger contra su suspensión provisional y el ciclista checo tampoco pudo tomar la salida de la Vuelta a España. Ahora la resolución definitiva del caso está en Lausana.

El corredor, que recibió la notificación de esas irregularidades en 2013, siempre ha defendido siempre su inocencia; dos médicos expertos independientes, contratados por él, determinaron que las fluctuaciones en los valores sanguíneos del corredor no eran anormales, ni indicaban una violación de las reglas antidopaje. Sin embargo, el Consejo de Expertos de la UCI no aceptó esas alegaciones y un mes después la UCI anunció su suspensión provisional.