Mollema y su alergia... ¡a la goma!

En el ciclismo de alta competición hasta el más mínimo de los detalles puede llegar a tener una importancia decisiva en el rendimiento de un corredor. Que se lo digan a Bauke Mollema que aterriza esta temporada en Trek. El holandés llega con la motivación extra que para él supone un cambio de aires después de muchos años y lo hace además, acompañado de un pequeño inconveniente al que año tras año le va buscando solución: tiene alergia a la goma, a todos los productos que llevan ese componente.

"Siempre tuve un gran problema con mis manos desde que era niño", desliza. "Luego el problema desapareció durante un tiempo para después regresar. Era especialmente difícil año tras año cada invierno. Creo que se debía a que tocaba los tubulares cuando limpiaba la bicicleta o quizás también porque salía a entrenar con guantes para el frío que me dejaban las manos calientes pero también sudorosas, que era peor. He pasado por un montón de dermatólogos a lo largo de mi vida y al final terminamos por hacer un test de alergias en un hospital. Me hicieron como treinta cosas diferentes en mi espalda hasta que descubrieron que era alérgico a la goma", relata Mollema.

Estamos hablando del año 2008 cuando se le diagnosticó ese problema. Es decir, de entonces a aquí, ha tenido que guardar algunas precauciones especiales, alguna de ellas encima de la bicicleta. La más notable es la que le ha impedido correr con manetas en sus frenos. "En su lugar sólo había que poner más cinta de manillar", recuerda. Un inconveniente que esta temporada puede cambiar: "Shimano ha cambiado el compuesto y podré correr con manetas de nuevo. Es una buena solución", valora.

Un cambio más para el tulipán de Leeuwarden tras hacer las maletas después de toda una carrera profesional en equipos holandeses. "Hay catorce nacionalidades diferentes aquí, todo el mundo es muy abierto, hay muy buen ambiente con los corredores, con los directores y el resto del personal, estoy muy cómodo. Además viene bien para mejorar mi inglés, ahora estoy hablando inglés a diario, incluso con corredores belgas y holandeses. Es genial estar en un equipo internacional", se felicita.